martes, 17 de marzo de 2015

COMO EXPLICAMOS LA IMPORTANCIA DE LA PIRAMIDE DE ZOSER



Zoser, fue el segundo faraón de la III dinastía, que  reino entre los años 2635 y 2615 antes de Cristo. Construyo en Sakkara su recinto funerario en el que la pirámide escalonada, la pirámide que se levantó en Egipto. La pirámide de  Zoser era un macizo de seis escalones todos de alturas desiguales, hasta alcanza los 60 metros. Su construcción fue objeto de varios cambios de proyecto, a partir de una mastaba cuadrada, que era de 63 metros de lado por 8 de altura. Esta mastaba estaba construida de un núcleo de caliza local, revestido de una capa externa de la fina caliza de Tura, perfectamente careada. Al  Terminada esta primera mastaba, se le añadió por los lados un nuevo revestimiento de caliza de Tura, de tres metros de ancho, pero 60 cm más bajo que el edificio original, que daba lugar a una incipiente mastaba escalonada. A todo esto se le sumó por el lado oriental una ampliación de 6 m de espesor, que convertía el cuadrado de la planta primitiva en un rectángulo con su eje mayor orientado de este a oeste. La mastaba fue transformada en el primero de los escalones de una pirámide de cuatro. Por su lado norte se comenzó a construir un templo funerario, pero antes de que las dos obras se acabasen, se produjo un quinto cambio de plan, consistente en ampliar la pirámide hacia el norte y hacia el oeste, añadiéndole dos escalones más. Una última ampliación por todos lados, con su revestimiento definitivo de sillares de caliza de Tura la hizo aún un poco mayor. La parte subterránea consta de un pozo vertical, de 28 m de profundidad, en cuyo fondo se encuentra la cámara del sarcófago de Zoser, revestida de placas de granito.



De ella parte un laberinto de corredores y habitaciones sin parangón en ninguna otra pirámide del Imperio Antiguo. A la cámara se bajaba desde el exterior por un corredor en rampa. Cuando el extremo superior de esta rampa hubo de ser cegado para construir las ampliaciones de la pirámide, se abrió un corredor con escaleras desde el templo funerario que, describiendo una gran curva, desembocaba en el tramo inferior de la rampa. Al término de ésta se guardaba, en una cámara a propósito, el rastrillo de piedra, de unos dos metros de longitud y tres toneladas de peso, que había de sellar definitivamente, como un gran tapón, el acceso desde el techo a la cámara del sarcófago. De la rampa de acceso parten, igualmente, galerías y escaleras que dan a los corredores y estancias que rodean la cámara del sarcófago. Revelan que su propósito era el de reproducir el interior de un palacio con los muros revestidos de placas de loza, inspirados en esteras, y con algunos relieves. Antes de que se hiciese la ampliación número tres de la mastaba inicial se abrieron a una profundidad de 32 m once tumbas para los hijos y mujeres del faraón. Probablemente estas tumbas no figuraban en el proyecto inicial. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario